Rosarios

Fig 1. Rosario de nácar. Foto de Rafa Mariscal

El Rosario es una oración , dirigida a Dios y a su Hijo Jesucristo, a través de la intercesión de María,  Madre de Dios y Madre nuestra. Significa «Corona de Rosas», ya que, según la tradición, cada vez que se reza un Ave María, se le está ofreciendo a la Virgen una hermosa rosa, (como símbolo de ofrecimiento y de entrega de nuestros corazones) y que una vez que se haya finalizado de rezar el Rosario completo, con todas esas rosas que se ofrecían se le podía hacer una corona, de ahí que a la Virgen se la considere Reina del Santíisimo Rosario .

El Rosario es un ejercicio piadoso que está compuesto por dos elementos:

La oración mental: Meditación de los misterios o hechos de la vida, muerte y gloria de Jesucristo y de su Santísima Madre. Estos misterios son 20 que se han dividido en 4 grupos: Gozosos, Dolorosos, Gloriosos y los Luminosos.

La oración vocal: Se inicia con el Padrenuestro, se prosigue con  el rezo de cinco decenas del Ave María, y se finaliza con la glorificación de la Santísima Trinidad, es decir, rezando el Gloria.

Para engrandecer el Rosario, se le incorporaron la letanías de la Virgen. En la sección de Oratorio de este blog, vienen las Letanías dirigidas a la Virgen de la Esperanza, por lo que os invito a rezarlas.

A lo largo de la historia numerosos papas han fomentado la pía devoción del rezo del Rosario, poniéndose énfasis sobre la importancia en la familia, considerandolo como modo práctico de fortalecer la unidad de la vida familiar y la de perseverar la paz en el mundo. Por lo que desde la Hermandad invita a todos los que leen estas líneas, a rezar el Rosario, como instrumento valioso para hacercarnos a Dios.

Los rosarios de Nuestra Virgen de la Esperanza

Fig 2. Rosario de nácar. Foto de Rafa Mariscal
Fig 2. Rosario de nácar. Foto de Rafa Mariscal

Los rosarios que utilizamos para rezar el Santísimo Rosatio, está compuesto por una sarta de cuentas, distribuida en grupos de diez, y separado cada grupo por otra cuenta de distinto tamaño. La sarta entera está siempre unida por sus dos extremos a una gran Cruz.

Para fabricar las cuentas se utilizaban semillas de caoba o incluso perlas reales, pero en la actualidad se fabrican de materiales artificiales. En el pasado eran comunes los rosarios hechos con huesos de olivo, algunos de los cuales se creía que eran fabricados con los olivos del huerto de Getsemaní.

Entre los rosarios de Nuestra Señora de la Esperanza, destacan el de Nácar, el de Azabache, y el de madera, además de disponer de otros como el de perlas mayorquinas, metálicos, etc.  Una relación de ellos son los siguientes:

Figura 1: Rosario de Nácar, en plata de ley, bañado en oro fino, engarzado con filigrana

Fig 3. Rosario de azabache. Foto de Rafa Mariscal
Fig 3. Rosario de azabache. Foto de Rafa Mariscal

cordobesa, y donado por Esperanza Carrillo y Manuel Ortega en 1996.

Figura 2: Rosario de Nácar, en plata de ley, engarzado con filigrana cordobesa, y donado por la familia de Ramón Latorre, en 2009.

Figura 3: Rosario de Azabache negro, en plata de ley, engarzado en filigrana cordobesa, de principios del siglo XX, y donado por la familia de Mollinedo.

Figura 4: Rosario de madera. El que más simbología, e importancia tiene para la Hermandad por su origen. Es el rosario bendecido por el Papa difunto Juan Pablo II desde Polonia, y entregado a nuestra Virgen de la Esperanza por la periodista Dñª Paloma Gómez Borrero.

Ésta conocida periodista se había interesado por la Cofradía y por su labor con los niños pobres de Jaén a través de nuestros colaboradores amigos Juan López Pérez y Jaime López Marín, y decidió donar a la Santísima Virgen de la Esperanza, el Rosario bendecido y recibido de las manos del papa Juan Pablo II, que lo había traído del viaje efectuado a su Polonia natal, mandando una carta que rezaba textualmente así:

«Me parece tan bonita vuestra iniciativa que os dejo con todo cariño el Rosario que me regaló el Santo Padre en el último viaje a Polonia. Es muy entrañable y pienso que en el año del Santo Rosario todavía adquiere una mayor relevancia. Con Todo afecto. Un abrazo a todos».

Fig 4. Rosario del Papa Juan Pablo II. Foto de Rafa Mariscal
Fig 4. Rosario del Papa Juan Pablo II. Foto de Rafa Mariscal

Paloma Gómez Borrero.